Tal vez tenía razón Foucault cuando imaginaba la desaparición del hombre como un rostro de arena borrado por el mar…aunque en esta modernidad puede ser, más bien, un rostro de cera que se derrite al calor de la tumultuosa algarabía. Por Alberto Morales Gutiérrez Si alguna palabra refleja en toda su dimensión la característica esencial […]
¡A los gritos!
